Una vez nacido y haciendo lo que hacen los niños los primeros años de vida, empiezo EGB. En el tercer curso me quise apuntar a clase de informática en esos horarios en los que llegabas mas tarde a casa. Pero informática era para mayores…solo podías ir si eras de quinto en adelante, que chasco. Y clases de cocina no había, así que, tocaba esperar.
Llegamos a quinto de EGB y sus clases de informática. Y luego sexto con las mismas clases de informática, las mismas literalmente, solo cambiaba el profe. Después séptimo, mas de lo mismo. En octavo me dedique a quemar tortillas de patata con mi padre y resultó mucho mas divertido.
Terminamos octavo curso, se acaba la enseñanza obligatoria y lo obligatorio era pensar a qué iba a dedicar mis siguientes años. Creí que hacer cocina me gustaría, pero en Vigo, que es donde nací y resido, no había escuela de hostelería en la que pudieran entrar chicos…Ahora por suerte si. Así que como se suele decir, más vale malo conocido…..me metí de lleno en la informática. Sin dejar de hacer cositas en la cocina por mi cuenta o de pinche con mi madre, sobre todo postres.
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Pasan (muchos) años y llegan los móviles, Internet y Ferrán Adriá. Más tarde los blogs, los smartphone y las estrellas Michelín de David Muñoz.
Descubro TRAVIENLACOCINA, CIRCUSDAY, LAAPRENDIZDECHEF…Y me pongo a pensar… ¿por qué no mezclar en un bol mis dos aficiones de niño? ¿Por qué no compartir gracias a la informática mis experiencias gastronómicas?
Empecemos, vaya bien o vaya mal me gusta, y eso, es lo que importa.
Let´s GO
