No intentes esconder tus sentimientos. Noto, cuando me miras a los ojos, esa nostalgia que en Galicia llamamos morriña.
Morriña orgullosa de aquel que ha recorrido mil lugares y ha trabajado en los mejores fogones. Morriña por la lejanía que te lleva a venirte a Vigo y así, de alguna manera, reducir la distancia física.
Orgullo peruano que, convertido en ilusión, te lleva a abrir en la ciudad un rinconcito donde compartir un poco de esa cultura andina que tanto añoras.
Compartir, mostrar y convencer a los más escépticos del enorme legado gastronómico que nos ofreces tú y tu equipo en este pequeño local.
Un local en el que se respira nostalgia, ilusión y orgullo. Sensaciones de esas que te hacen sentir bien, cómodo, como en casa. Mil colores que te trasladan a algún lugar lejos del tumulto del centro de la ciudad.
 |
|
Crujiente de salsa de camarón y gamba curada en agua de mar y alioli de ají amarillo
|
Tienes morriña, amigo mío. Pero, aunque está claro que nunca nos podremos igualar, Vigo ya es tu ciudad, porque sin duda nos has ganado para siempre.
Huevo (63ºC), ají amarillo y trufa
|
No podía tener otro nombre el menú degustación por el que optamos para la cena, «Viaje a Perú» . Sabores frescos con matices muy interesantes. Muy buen producto y muchas elaboraciones diferentes que hacen de cada plato algo para el disfrute y el descubrimiento de esta cultura sudamericana.
 |
| Tiradito de Seriola, cilantro, algas y flores |
Unos platos maravillosos de recetas peruanas con productos gallegos de calidad y con la magia de Juan C. Perret hacen de Kero un lugar de visita obligada en Vigo.
 |
| Ceviche de sardina curada en agua de mar y pisco, boniato |
 |
| Lubina a baja temperatura |
Es difícil, pero sé que debo dejar de enamorarme de los sitios que visito y de la gente que conozco. O no.
 |
| Mazamorra morada |
 |
| Suspiro de limeña |
Os dejo, me voy a comprar un poncho…
Sed peruanos mis comilones.
