Hay momentos en los que la desidia te vence (o eso creemos), en los que por las mañanas te levantas cansado y por las noche no te apetece dormir. Lo peor es cuando en tu cabeza empiezan a surgir, de nuevo, las ideas. Ideas huérfanas de esa ilusión que te da fuerzas para llevarlas a cabo. Pero todo lo malo es esperar y que esos días, a priori interminables, se vean acorralados y condenados a su fin. Porque un día cualquiera, de esos sin contenido aunque con demasiado continente, recibes ese email, llamada o publicación en Instagram que genera la chispa y prende la llama de nuevo. Otra vez sientes ese calor en tu cabeza y, aunque en principio de forma sutil, hace que vuelvas a sentir esas sensaciones de querer hacer, de compartir o de salir a la calle y respirar hasta que se te suelten las costillas.
Y ese chispazo que prende la llama es lo que me hacen sentir Bibi y Javi cada vez que charlo con ellos. Esa energía positiva y llena de ilusión es, sin duda, lo que transmiten en La Tula y en sus platos. Un lugar divertido donde el buen comer, beber y conversar hacen de este local un indispensable en el ocio de la villa de Bouzas y la ciudad de Vigo.
(enlace del post de recomendación)
Javi y Bibi, como muchos vigueses, fueron de los que se marcharon para formarse y establecer una vida profesional fructífera en los Madriles, pero como la cabra tira al monte y el vigués le hace más caso a la morriña que el ratón al queso, comenzaron a divagar en la idea de volver como emprendedores. Poco a poco y ordenando sus ideas le fueron dando forma a La Tula.

C&G: ¿A qué os dedicabais antes de abrir La Tula?
Javi: Después de haber estudiado en la escuela superior de Santiago de Compostela y habiendo recorrido varios sitios, me fui a Madrid y me dediqué a formar cocineros para una gran cadena hostelera.
Bibi: Yo estudié Historia del arte y vengo de un mundo que no tiene nada que ver con la hostelería. Antes de La Tula mi trabajo era la dirección de marketing digital en diferentes empresas de Internet, relacionadas con la salud, el mundo editorial, etc. Números, reuniones, programadores, Google, estrategias, ordenadores y nada que ver con lo de ahora. Pero si tengo que escoger me quedo con lo de ahora.

C&G: Sabemos que el sitio de Javi está en la cocina, pero Bibi, después de haber desempeñado una actividad laboral tan distinta ¿cómo fue tu adaptación a la hostelería?
Bibi: Fue mejor imposible. Aunque hace muchos años ya había trabajado como extra de camarera, llevar la gestión de un bar restaurante como es La Tula fue un auténtico reto para mi. Mi trabajo es una auténtica gozada. Mientras Javi es la cocina y el alma del negocio en el diseño de platos, yo soy el contrapunto y el apoyo de Javi. Soy la que en la sombra le pone los puntos sobre las íes, jeje. Papeleos, laboral, cuidar decoraciones, que todo esté en su lugar y que las ruedas giren. Esa es mi labor. Entre los dos siempre hacemos todo lo que podemos.
C&G: ¿Volverías a tu vida anterior?
Bibi: Viendo mi recorrido hasta aquí ahora con perspectiva, no volvería a lo anterior ni de broma. Ahora sí que estoy encantada. Me fascina la hostelería con todo lo que conlleva, como es la atención al cliente, los momentos de correr, el mundo de los vinos, la presentación del espacio , etc. Conociendo esto no quiero saber ya nada ni de ordenadores, ni de programadores, ni de oficinas cerradas. Al no proceder del sector de hostelería procuro mantenerme actualizada con formación constante.
C&G: ¿Por qué Bouzas para situar La Tula?
Javi: Para nosotros Bouzas es de lo mejor que hay en Vigo. Bouzas nos encanta, es como un pueblo pegado a la gran ciudad. Tiene mar, no hay cuestas. Lo tiene todo para ser un 10. Aquí hay un duende especial . Veníamos de trabajar en Madrid. Yo en centros comerciales y Bibi en oficinas. Cuándo apareció la oportunidad de este local a pie de mar nos enamoró la idea de poder trabajar en Bouzas, en un lugar con estas vistas. Qué más se puede pedir? pensamos. Y nos lanzamos a la aventura. Se trataba de una inversión bastante potente y con bastante riesgo pero merecía la pena intentarlo. Y aquí estamos, confiando mucho en nuestro proyecto. En este tiempo sí que vemos que Bouzas se está convirtiendo en una zona de moda para los vigueses y es que no es para menos. Las puestas de sol desde La Tula creo que deberían estar en el top ten de toda España.

C&G : ¿A qué se debe el nombre del restaurante?
Javi: Al nombre le dimos muchas vueltas. Los dos somos un poco sentimentaloides y el proyecto era muy personal, lleno de cariño y de pasión. Y eso también lo quisimos reflejar con el nombre escogido. Tula es el nombre de mi abuela materna, una gran cocinera que deleitaba siempre con sus sabrosuras. Mucha gente nos pregunta cuál es el origen del nombre. Los hay que buscan el significado en Internet. Los hay que nos preguntan si es porque es una herramienta y hasta nos tienen dicho que no recuerdo ahora en qué país de Latinoamérica el nombre se refiere al miembro masculino, jeje pero no.
Las recomendaciones de La Tula
La Tula: Asumimos que no somos buenos críticos gastronómicos. Entre el trabajo, la familia y que cerramos los lunes como tantos otros restaurantes que también cierran lunes pues no conocemos toda la variedad que nos gustaría. De hecho tenemos una lista de sitios pendientes que tenemos muchas ganas de ir a probar y que por haches o por bes aún no lo conseguimos. De los que conocemos y si tenemos que quedarnos sólo con tres que se adaptan un poco a nuestro horario y que son family friendly nos quedamos con: Nikko, nos encanta la creatividad, su cocina asiática fusión, el ambiente de su restaurante y la cocina es de rechupete. Por nuestra zona nos gusta mucho La Carpintería, nos encanta su propuesta innovadora. Nos parecen unos súper emprendedores de pies a cabeza por traer una cocina de vanguardia siendo los pioneros en un barrio muy tradicional. Destacamos sus postres que son para chuparse los dedos.
Cómo opción de restaurante tradicional nos quedamos con el bar Nisio en Teis, nos encanta su arroz con bogavante y nos gusta mucho su variedad de pescados y mariscos siempre frescos.

C&G: Ese plato que queréis hacer y no os atrevéis todavía a tener en carta.
Javi: Realmente nos gustaría hacer muchos platos más elaborados pero debido a las dimensiones de la cocina y el volumen de trabajo no nos queda otra que ceñirnos a lo que nos resulta realmente operativo.
C&G: Ese plato que probasteis y os encantó.
Javi y Bibi: Un plato que nos viene a la memoria que comimos hace pocas semanas fue el huevo a baja temperatura en salsa carbonara que lo probamos en La Central en el Casco Vello. Era un huevo cocinado a baja temperatura con muy buena cocción y una espuma de salsa carbonara realmente sabrosa con un toque de trufa. Nos dejó el paladar lleno de una explosión de sabor. Un 10!
C&G: Aquel postre que os flipó.
Bibi y Javi: Deconstrucción de tarta de Santiago en el restaurante Culler de Pau. Era un postre muy divertido. Una teja de una especie de merengue con una sopa amarilla. Jugabas rompiendo la teja en una sopa con sabor a la tarta de Santiago. Un postre con cierta simpleza, de gran creatividad, muy original y muy sabroso.
C&G: ¿Cómo definiríais vuestra cocina?
Javi: Entre lo tradicional y lo contemporáneo. Ante todo cocina de producto fresco y elaboración casera 100%. Nos gusta la cocina de siempre y nos gusta la cocina de vanguardia. Quisimos plantear una cocina con un enfoque amplio y danzar entre dos aguas. La razón es que queremos llegar a un amplio público. Que tanto puedan comer mis padres, por poner un ejemplo de paladar clásico, como también otros comensales que buscan algo diferente y dar un punto de sorpresa.

C&G: ¿Cómo os fue en el desconfinamiento?
Bibi: A pesar de la incertidumbre y los miedos por cómo iba a ser el desconfinamiento, la verdad que no nos podemos quejar. Nuestro punto fuerte es nuestra estupenda y privilegiada terraza a pie de mar. Este verano hemos trabajado mucho. En La Tula hemos visto que ni un virus frena las ganas de pasárselo bien, juntarse con los seres queridos compartiendo unas bebidas y disfrutando alrededor de una mesa de una buena comida. Todo ello, claro, con las limitaciones que tocan por esta situación en la que nos encontramos. Que la verdad que no son pocas.
C&G: Un deseo
La Tula: Que todo se mantenga tal y como es ahora. Eso para nosotros ya sería todo un éxito. Nos sentimos afortunados y no pedimos más de lo que ya tenemos.
Ya véis, todo corazón en el centro de Bouzas. La Tula, un local para disfrutar de la buena cocina y las puestas de sol en uno de los mejores barrios de Vigo.
