(Pincha aquí para ver la entrevista)
Todos a los que nos gusta la cocina lo hacemos con cierta pasión, entretenimiento o cariño. Hay profesionales que tienen buena mano sin más o podría incluso decir «suerte» a la hora de «confeccionar» buenos platos. Pero la cocina cuando se hace desde el amor más profundo y cuando pones todo el corazón en cada pequeña cosa que haces, se nota. Se nota más allá de tu restaurante, se nota cuando hablas con cierta nostalgia de tu equipo, de tus empleados y te tiembla la voz, sin hablar.
Fantástica charla con Alberto Lareo sobre su situación personal y como cree que será la nueva «normalidad» de la restauración.